viernes, febrero 18

Tú eres tú, el otro es el otro

Hola Gente bonita!!! tanto tiempo!!! les queria decir que a los que tenga en Facebook me escriban asi se quienes son :))) soy bastante despistada.... :))

Les dejo un articulo que me gusto mucho, cosa que todos vivimos de cerca... o esperamos de otros u otros esperan de nosotros ... dificil tarea la de vivir y dejar vivir, la de aceptarnos y la de aceptar al otro ...

Les extraño y aca estoy volviendo a escribirles... la vida se me ha complicado un poco al ir creciendo quitandome tiempo para algunas cosas y sumando para otras :)) pero siempre a como se , dando un paso adelante... desde que decidi, como dice este articulo a aceptar qeu soy una persona y debo ser yo misma... asi luego poder aceptar a los demas, ese es el secreto de no meterse en la vida de los demas.... el tener una vida propia :)))

Les dejo con el articulo, que lo disfruten y nos veremos mas seguido...

mis mas sinceros cariños desde Kiel Alemania :))))


Tú eres tú, el otro es el otro

No puedes ser feliz y disfrutar de paz interior, si vas por ahí esperando que los demás sean y vivan como quieres que sean y vivan.
- Wayne Dyer

No vemos el mundo tal y como es, vemos el mundo tal y como somos . Cada quien tiene su propio mapa. Cada uno tenemos una concepción sobre el mundo totalmente diverso. Si en estos momentos te pidiera que imaginaras un perro, lo más seguro es que tendrías la visión de un pastor alemán, o tal vez un chihuahueño, o un dálmata.

No podría forzar a una multitud a concordar en uno solo. Esto es porque tal vez puedes pensar en el que tuviste en la infancia, el que tienes hoy en casa o alguno que viste por primera vez en televisión.

Desde que nacemos estamos involucrados en un espacio sociocultural donde recibimos toda clase de información. Creencias que van desde “las matemáticas son difíciles”, “siempre serás gorda”, hasta otras que hieren más como “eres la culpable de los problemas en la casa”.

Hemos vivido tantas cosas que somos una amalgama de colores diversos. Si fuéramos una pintura, tendríamos claroscuros, algunos más brillantes, otros más opacos, pero que al verla en conjunto sería una obra maestra.

Uno de los grandes errores del ser humano que limita su crecimiento personal es creer que los demás tienen que pensar exactamente igual a como piensa él, que tienen que reaccionar igual porque es lo “normal”.

¿Lo normal para quién?, ¿En qué momento?, ¿Bajo qué circunstancia?

Las cosas cambian cuando enfocamos con un diferente cristal y aceptamos que cada quien tiene su propia historia, su propio acontecer diario, sus propios gustos, sus propias creencias.

Me da risa cuando alguien defiende a capa y espada sus comentarios como si fueran palabra sagrada: “Es que sin título universitario no eres nadie”, “Si no te casas antes de los 30 ya se te fue el tren”, “Tienes que graduarte y estar en una empresa importante”, como si eso hiciera la realización de todo el universo.

En esos momentos habla el ego, habla el mapa de cada uno.

Sería un desgaste tratar de juzgar a la otra persona porque no le interesa la misma universidad que a nosotros, porque prefiere la música country en vez de la salsa o porque es psicólogo en lugar de ingeniero en sistemas computacionales.

Dicen que el gusto se rompe en géneros, pero también se rompen relaciones si no sabemos ser tolerantes frente a esas preferencias.

La siguiente vez que alguien te haga un comentario totalmente diferente a lo que estabas acostumbrado o tenga una reacción que no habías observado en este planeta, no te preocupes, no trates de entender; recuerda que cada quien es diferente, que cada uno tiene su propio mapa para hablar, para pensar y para actuar.

Tú eres tú, el otro es el otro. Eso te hace un ser único y especial. No lo olvides.

David Montalvo